Hacia la integración de mHealth en la atención primaria en los Países Bajos: Un análisis cualitativo de las perspectivas de los interesados

Existe una creciente necesidad de cambiar estructuralmente la forma en que se organiza la atención de las enfermedades crónicas, a medida que los sistemas de salud luchan por satisfacer la demanda de esa atención. m Las tecnologías de la salud pueden alterar los enfoques tradicionales de la prestación de servicios de atención de la salud estimulando la autogestión de los pacientes con enfermedades crónicas. El objetivo de este estudio fue comprender el complejo entorno relacionado con la introducción de soluciones de mSalud en la atención primaria para la gestión de enfermedades crónicas, teniendo en cuenta el funcionamiento del sistema de salud y las opiniones de los interesados.

Esmee L. S. Bally,* and Tomris Cesuroglu.Toward Integration of mHealth in Primary Care in the Netherlands: A Qualitative Analysis of Stakeholder Perspectives. Front Public Health. 2019; 7: 407.  Disponible en: https://www.frontiersin.org/articles/10.3389/fpubh.2019.00407/full

Métodos: Se utilizó un enfoque transdisciplinario basado en la metodología del aprendizaje y la acción interactivos (ILA). Se celebraron entrevistas exploratorias (n = 5) con representantes de grupos de interesados para identificar y posicionar a los principales interesados. Posteriormente, se consultó por separado a los profesionales y a los pacientes con enfermedades crónicas para explicar con más detalle las barreras y los facilitadores de la integración, utilizando entrevistas semiestructuradas (n = 17) y un grupo de discusión (n = 6). Se llevaron a cabo entrevistas de seguimiento (n = 5) para examinar las conclusiones iniciales del análisis de los interesados.

Resultados: La mayoría de las partes interesadas, en particular los médicos de atención primaria y los pacientes, parecen tener una actitud de apoyo o mixta hacia la integración de la salud móvil. Por otra parte, es probable que varios interesados poderosos, incluidos los encargados de desarrollar sistemas de información de atención primaria y los especialistas médicos, muestren resistencia o falta de iniciativa respecto de la integración de la salud móvil. Los principales obstáculos a la integración de la sanidad móvil son la falta de interoperabilidad con los sistemas de información existentes, las dificultades para financiar la aplicación de la sanidad móvil y la escasa disposición de las prácticas generales a cambiar. Entre los posibles facilitadores de la integración figuraban el diseño conjunto de soluciones de salud móvil y los incentivos para los pioneros.

Conclusión: Los interesados reconocen los beneficios de integrar la sanidad móvil en la atención primaria. Sin embargo, importantes barreras percibidas por los usuarios finales les impiden adoptar y utilizar plenamente la sanidad móvil. Este estudio muestra que la complejidad de la introducción de la mSalud en la atención primaria exige estrategias que fomenten la colaboración entre múltiples interesados para mejorar el éxito de la implementación.